Álvaro Cornellana, de 37 años de edad, denunció graves apremios ilegales sufridos en domingo a la madrugada en manos de policías de la Comisaría Primera de Santa Rosa. Relató que fue golpeado en todo el cuerpo, no se le permitió realizar llamada telefónica alguna y no lo revisó ningún médico policial. Radicó la denuncia en fiscalía santarroseña.
El hombre relató que “fui a las carreras de auto, luego fui a ver el espectáculo que estaba en el Casino, paraba en el motel Caldén, quise entrar en un bar que estaba en el camino, no me dejaron entrar, llamaron al patrullero, vino la policía, llegó un móvil me empezaron a golpear sin dar explicaciones, me metieron en un celda, me dejaron ahí sin zapatillas, me esposaron, al mediodía me llevaron a otro lugar, me ficharon, estoy todo golpeado”.
Al mediodía lo liberaron fue al hospital y allí un médico constató las lesiones. “Salí de ahí y estaba totalmente mal y me tuvo que ir por mis propios medio al Lucio Molas. Me tuvieron que dar calmantes intravenosos. Todavía estoy en cama, no puedo ir a trabajar por el fuerte dolor que tengo en el hombro”, indicó.
Desconoce la identidad de los policías per sabe que corresponden a la Comisaría Primera de Santa Rosa. “No me permitieron nada, les dije que me podía ir solo al motel que quedaba a una cuadra pero me cargaron en el patrullero igual, no me dejaron hacer ninguna llamada, me metieron en un calabozo con mucho olor a orín y heces, la verdad que fue un episodio desagradable para cualquier ser humano de cualquier condición que sea”, afirmó.
Indicó que se pasó golpeando la puerta pero por toda respuesta le decían “quedáte tranquilo”. Y no le permitieron llamar a nadie. “Me sacaron el celular y el documento y para irme tuve que firmar, porque si no no me dejaban ir, un papel en el cual decía que me había resistido a la autoridad. Y no sé por qué causa”, se quejó.
Rescató la buena atención de la policía que estaba de guardia en el hospital Lucio Molas y los médicos de guardia que lo atendieron.
Álvaro Cornellana se fue a la ciudad de Córdoba en el año 095 y regresó hace 8 meses, cansado de la inseguridad de la gran ciudad. En unos días estará inaugurando una fábrica textil. Los últimos detalles previo a la apertura, está con fuertes dolores de hombro, dificultades para manejarse. No tuvo en cuenta en su proyección, la posible acción policial de Santa Rosa.
