Fabricio Hernández fue condenado a 2 años de prisión de ejecución condicional e inhabilitación absoluta y perpetua, por el delito de Peculado, al utilizar cheques del municipio como garantía, para una operación personal
Tribunales santarroseños
Tal como lo solicitara el fiscal Marcelo Amado, Fabricio Hernández fue condenado a 2 años de prisión de ejecución condicional e inhabilitación absoluta y perpetua, por el delito de Peculado, al utilizar cheques del municipio como garantía, para una operación personal.
La sentencia se conoció al mediodía de hoy en la Sede de la Cámara en lo Criminal Nº 1 en el Centro Judicial de Santa Rosa. El Fiscal General, Dr. Jorge Marcelo Amado, manifestó que en marzo y abril del año 2009, Carlos Fabricio Hernández utilizó cheques que estaban bajo su responsabilidad, por ser el Intendente del municipio de Miguel Cané, como garantía de una operación personal en la que nada tenía que ver dicha Municipalidad.
Sostuvo que Hernández vendió esos documentos en la financiera del señor Cacciatore, Financiar S.R.L. por la cifra de $250.000. El Ministerio Público Fiscal, acusó a Carlos Fabricio Hernández por el delito de peculado y uso de documento privado falso en concurso ideal y solicitó se condene al imputado a la pena de dos años de ejecución condicional e inhabilitación absoluta perpetua, con costas
Por su parte, el Defensor Particular, Dr. Francisco Gabriel Marull, afirmó qué «La conducta no es penalmente responsable, es atípica». Atento a todo ello, consideró que corresponde al Tribunal dictar la absolución de su defendido.
El Tribunal estuvo integrado por los magistrados: Dra. Elvira Rossetti, en su carácter de Presidente Sustituta; Miguel Angel Vagge -Juez Subrogante- y Miguel Angel Gavazza -Juez Sustituto y no hubo trámite de lectura de la sentencia.
Cabe recordar que en abril de 2009 en su función de Intendente de Miguel Cané en la provincia de La Pampa, Carlos Fabricio Hernández presentó uno de los cheques por 26.000 pesos, para avalar un préstamo de la firma Financiar S.R.L. de General Pico.
El otro cheque era de 226.000 pesos y fue entregado en mayo de ese mismo año. Los cheques nunca se cobraron porque la cuenta no tenía fondos. Además, tenían la firma falsificada del tesorero, Sebastián Avendaño.
Fue el mismo tesorero el que lo denunció. En septiembre de 2009, seis meses después de ocurridos los hechos, Carlos Fabricio Hernández denunció el extravío de la chequera y “levantó” los cheques en la financiera.
En los alegatos, el Fiscal General, Jorge Marcelo Amado pidió dos años de prisión en suspenso e inhabilitación perpetua para el exjefe comunal, a quien le imputó los delitos de peculado y uso de documento privado.